Janax-Pacu: Las alpacas del cielo y su exterminio. Vergüenza de la humanidad.

Parecería imposible que la humanidad pudiera olvidar en un lapso de tiempo tan corto a una criatura  maravillosa que hasta hace unas pocas décadas habitaba la tierra. Hablamos de las alpacas voladoras del Perú. Si bien hoy en día es casi imposible encontrar registros de su existencia, las Janax-Pacu o alpacas voladoras fueron desde finales del siglo XIX y hasta pasada la segunda mitad del XX, el principal sustento de la industria textil peruana. Tanto así que acabó por exterminar por completo a la totalidad de su población.

Petroglifo en Palca



Existen registros de las Janax-Pacu desde el periodo neolítico. En algunos lugares se les conocía también como Kunturi-Pacu, o alpaca cóndor. Su presencia en representaciones textiles desde tiempos preincáicos denota la importancia de estas aladas criaturas para los pueblos que habitaron la región andina durante siglos. Las alpacas voladoras formaron parte significativa dentro de la cosmovisión de estos pueblos. Para los Incas, las Janax-Pacu eran veneradas al mismo nivel que los dioses de la talla del Inti, el dios sol o Mama Quilla, la madre luna. Existen incluso, teorías que aseguran que el abandono de la ciudad de Machu Picchu, se logró gracias a estos camélidos del aire. Con el propósito de encubrirlas y protegerlas de los conquistadores españoles, los habitantes fueron despoblando la ciudad a bordo de las alpacas voladoras, sin dejar rastro o camino alguno que condujera a la  misma.




Tejido de Paracas 300 - 200 a. C.
Retazo preincaico. Datación incierta.

Durante siglos, se utilizó esporádicamente la lana de las alpacas voladoras en mantos rituales. En el caso de este particular animal, para obtener la lana en su forma más pura y fina, primero debía sacrificarse al animal y desollarlo, de este modo, se lograba conservar la integridad de la fibra. Las culturas originarias del Perú realizaron estos sacrificios siempre de manera cautelosa y con profundo respeto, y siempre después del nacimiento de una nueva Janax-Pacu.








No fue sino hasta finales del siglo XIX, cuando se introduce la industria textil en el Perú, que se empieza a pensar a la lana de la alpaca voladora como un producto redituable. Desde las primeras fábricas textiles como la "San Isidro" y  la "Santa Catalina" comenzaron a procesar esta fibra, obteniendo así finísimos paños  que no podían considerarse más que un absoluto lujo. 

Fábrica de Textiles "San Isidro" 1898
Las telas comenzaron a exportarse a Europa, causando furor dentro de los círculos aristocráticos, quienes descubrieron en esta fibra una exótica alternativa a la dura lana de borrego y la pasada de moda cachemira. Con el auge de la revolución industrial y el posicionamiento de las clases burguesa y media, ávidas por demostrar su creciente poder adquisitivo,  la demanda de productos elaborados con la llamada "Lana Nube" explota, no sólo en Europa pero también en los Estados Unidos y el resto de América.

Durante las sucesivas décadas, se da una sobreexplotación del la "Lana Nube", causando la matanza indiscriminada de miles de alpacas voladoras a lo largo y ancho del país. Todo esto, respaldado por leyes y políticas impulsadas por los gobiernos en turno, quienes vieron en esta industria la oportunidad perfecta para llenarse los bolsillos con cientos de miles de Nuevos Soles. Poco caso se hizo a los reclamos de los pueblos originarios y de organizaciones mundiales que denunciaban el exterminio de estos animales. También se obviaron las recomendaciones de instalar criaderos para evitar la extinción de los mismos.



Ya en los años 50's, con una sobredemanda del producto, el animal se hacía cada vez más difícil de encontrar. Las fábricas debían recurrir a estrategias extremas para mantener sus producciones a flote. Se pagaba a campesinos que por necesidad económica, se vieron convertidos en cazadores furtivos de alpacas voladoras. Se buscó por toda la cordillera de Los Andes a las portadoras de este preciado material. Debido a que a las alpacas se les mataba antes de entrar a las fábricas, el producto comenzó a bajar su calidad, pero esto no detuvo  la demanda. La lana nube dejó de ser un producto de lujo y en la década de los 60 se había convertido en un producto de consumo masivo en casi todo el mundo. 





En el año1969, en plena coyuntura del reciente golpe de estado en el cual la junta militar nombraría a su líder Juan Velasco Alvarado como presidente de la nación, brota el escándalo del exterminio absoluto de la población de alpacas voladoras.  Durante meses se realizan búsquedas exhaustivas por encontrar alguna alpaca voladora sobreviviente, hasta que en junio del 1971, la recién creada organización Greenpeace halla a Unay, la última de las Janax-Pacu sobre el planeta.

Fotografía de Unay. Martín Chambí
A pesar de los esfuerzos realizados por distintos organismos internacionales, Unay no vivió más que unos meses posterior a su "descubrimiento". Vivió sus últimos días bajo los reflectores de la prensa nacional e internacional. Unay se convirtió en el símbolo de los movimientos por los derechos de los animales y del respeto a las culturas originarias a lo largo y ancho de América. Su deceso fue considerado el mayor fracaso de las políticas nacionalistas del gobierno militar.

Los siguientes años representaron el periodo más oscuro en la historia del Perú. La dictadura militar tuvo como principal objetivo, silenciar el hecho y borrar de la historia del país así como de la memoria colectiva, la existencia de las alpacas voladoras. Se quemaron libros, fotografías, diarios, mantos y todo objeto, ya sea que estuviere hecho de lana nube o en el cual estuvieran éstas representadas. Este objetivo se cumplió con tan rotundo éxito que hoy en día, es casi imposible encontrar testimonios como los que aquí les presentamos. Por suerte, logramos recuperar estos materiales gracias a colaboradores en todo el mundo, la mayoría son provenientes de colecciones privadas resguardadas en Europa.

Esperamos que en algunos años, el gobierno peruano asuma su culpa y complicidad en el exterminio de tan grandioso espécimen. Su muerte no será en vano, servirá como lección para todos los humanos  y como prueba de lo que nuestra avaricia y consumo desmedido nos ha llevado a destruir.  

¡Justicia por Unay!
¡Justicia por todas las Janax-Pacu!
¡Ni perdón ni olvido!

El secreto de la vida eterna

Así sucedió en Argentina, la búsqueda por la vida eterna y sus catastróficas consecuencias sociales. Un documento imperdible para entender la conducta humana.

El oscuro secreto Nazi de los Minions

¿Sabía usted que "minioms" era el nombre con el que se denominaba a los niños judíos que adoptaban los científicos nazis para hacer experimentos con Cyclon-B? el mismo componente gaseoso usado en las cámaras de gas "sobivos".